Ayer se celebró el Día Mundial del Reciclaje, una iniciativa nacida en 1994 con el objetivo de concienciar a la población acerca de la importancia de la recuperación y el reciclado de los residuos que generamos para su reutilización como nuevos recursos. La FER aprovechó la efeméride para destacar la contribución vital que realizan las empresas recuperadoras en la reconversión de residuos en recursos.
Las más 5.000 empresas recicladoras de metales férricos, no férricos y neumáticos fuera de uso (NFU) que hay en España emplean a más de 33.000 personas y generan un volumen de negocio superior a los 10.000 millones de euros, cerca del 1% del PIB nacional.
El presidente de FER, Ion Olaeta, aprovechó la celebración del Día Mundial del Reciclaje para dar a conocer los últimos datos disponibles sobre recuperación de residuos en España: “El pasado año se gestionaron en nuestro país cerca de 7,2 millones de toneladas de chatarras férricas, 114.000 toneladas de baterías de plomo ácido de automoción y 261.514 toneladas de envases metálicos”.
Con tal capacidad de reconversión de residuos en recursos, “la industria del reciclaje garantiza el acceso a materias primas imprescindibles, contribuye al desarrollo sostenible, consigue que se ahorre energía y ayuda a reducir las emisiones de efecto invernadero”, destacó el máximo responsable de la federación.
Así, según datos de FER, el uso de aluminio reciclado permite reducir el consumo energético en un 95% en comparación con el uso de materias primas. Este ahorro de energía alcanza el 85% en el caso del cobre, el 74% para el hierro y el acero, el 60% para el zinc y el 65% e el caso del plomo.
“Apostar por la industria del reciclaje es apostar por el medio ambiente, por la creación de empleo y por la innovación”, afirmó Ion Olaeta. “Además, los gestores de residuos son esenciales e imprescindibles para que se lleven a cabo los objetivos y políticas planteados por las diferentes administraciones europeas, nacionales, autonómicas y locales”, concluyó.