La Comisión Europea envió ayer a los Estados Miembros su consulta para el proyecto de transformación del Marco Temporal de Crisis de las ayudas estatales en un Marco Temporal de Crisis y Transición para facilitar y acelerar la transición ecológica en Europa. Esta propuesta forma parte del Plan Industrial Green Deal, destinado a garantizar un acceso más rápido a la financiación para las empresas que operan dentro de la Unión Europea (UE).
La propuesta de un Marco Temporal de Crisis y Transición tiene como objetivo impulsar las inversiones para un despliegue más rápido de las energías renovables, así como apoyar la descarbonización de la industria y la producción de los equipos necesarios para la transición de las emisiones netas a las cero, y preservar la integridar y la igualdad de las condiciones en el mercado único.
Durante la presentación, la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, declaró que Europa está «viviendo un momento decisivo, la década que decidirá si vamos a tener éxito o no en la lucha contra el cambio climático», y destacó que «lo más importante es la industria con emisiones netas cero».
Modificaciones propuestas por Bruselas
Por un lado, se pretende facilitar y apoyar el despliegue de las energías renovables y la descarbonización de la industria. Se concederán ayudas a las tecnologías menos maduras, como el hidrógeno renovable, sin licitación competitiva, siempre que se establezcan ciertas salvaguardias para garantizar la proporcionalidad del apoyo público.
Además, se incentivarán las inversiones que conduzcan a una reducción significativa de las emisiones mediante la inclusión de límites máximos de ayuda más elevados y cálculos de ayuda simplificados. Es decir, que la ayuda se determinaría como una parte de los costes de inversión.
La Comisión también quiere dar apoyo a las inversiones en la producción de equipos estratégicos necesarios para la transición de las emisiones netas a las cero, con el fin de acelerar la transición a una economía cero emisiones y superar la actual crisis energética. En este sentido, se propone abordar el déficit de inversión productiva en sectores estratégicos para la transición ecológica.
Esto se produce en un contexto de desafíos globales que plantean la amenaza de que las nuevas inversiones en estos sectores se desvíen en favor de terceros países fuera de Europa. Por eso, otro de los planteamientos sería facilitar el apoyo de los Estados miembros a las empresas productoras de baterías, paneles solares, turbinas eólicas, bombas de calor, electrolizadores y captura, uso y almacenamiento de carbono, así como de las materias primas necesarias para la producción de todos los equipos.
En el caso de que los proyectos estén en regiones desfavorecidas de la UE, que el PIB sea inferior al 75% de la media europea, o que implique una inversión en varios estados miembros, y para los que se disponga de apoyo en terceros países, se compensaría con más ayudas proporcionales para igualar el nivel de apoyo ofrecido en otros países, hasta lo necesario para que la inversión pueda realizarse en Europa.
Estas nuevas disposiciones estarían en vigor hasta el 31 de diciembre de 2025.
Ahora queda que Los Veintisiete evalúen las propuestas de la Comisión y envién sus observaciones a Bruselas, que se debatirán en el próximo Consejo Europeo ordinario el 23 de marzo. Después, y según lo previsto por Bruselas, se adoptaría el Marco Temporal de Crisis y Transición.
Fuente: Energética21