El encuentro organizado por las Cámaras de Comercio Europeas con la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, y el director adjunto de la Comisión Europea en España, Jochen Müller, ha tenido lugar recientemente. Durante el acto, presidido por Miriam Rodríguez, presidenta de Cámaras Europeas y Cámara Griega y moderado por Jorge Barrero, director general de la Fundación COTEC se ha profundizado en las prioridades del Pacto Verde, que deben inspirar al sector empresarial a corto y largo plazo, exponiendo las oportunidades y desafíos que presenta la transición ecológica de la mano de empresas líderes en sostenibilidad pertenecientes a las distintas cámaras de comercio europeas en España.
Construyendo prosperidad
En el acto, la vicepresidenta enfatizó la trascendencia del Pacto Verde Europeo, que ha avanzado de manera ágil y ejemplar ante el desafío de esta pandemia global. De hecho, la ministra utilizó el ejemplo de la pandemia para resaltar la necesidad de trabajar juntos con el objetivo de afrontar la recuperación desde una Europa que movilizará una cantidad de recursos jamás vista antes. En total, alrededor de 1,8 billones de euros.
Unos recursos que deben servir para transformar nuestro modelo productivo a través de una reflexión más justa y compacta de las necesidades sociales y medioambientales. “España comparte la visión estratégica de que hay que repensar el tejido productivo y generar una reacción de arrastre. Por eso desde el Gobierno hemos impulsado el Plan Nacional de Recuperación, Transformación y Resiliencia en línea con los objetivos del Pacto Verde Europeo”.
Este plan de recuperación pretende no sólo proporcionar la financiación pública necesaria para la transformación energética y digital de la economía española, sino también movilizar el capital privado con un efecto multiplicador de 1 a 4.
“Todas estas iniciativas requieren alianzas estratégicas entre el sector público y el privado. Debemos, además, aprender de la experiencia de países líderes en sostenibilidad dentro y fuera de la Unión Europea y trasladar ese conocimiento a nuestro país. Podemos utilizar las ventajas competitivas que nos ofrecen nuestros recursos naturales, pero sobre todo poniendo en valor a las personas”, afirmó la ministra.
Previamente al encuentro, las empresas socias de las cámaras europeas tuvieron la oportunidad de mandar sus preguntas sobre el Pacto Verde a la Ministra. Varias preguntas se centraron en la viabilidad y la cabida dentro del Pacto de Energías Limpias relativamente nuevas en nuestro país, como es el caso del hidrógeno verde. Se inquirió así acerca del punto de madurez de esta tecnología en España.
La ministra reafirmó el interés de España en desarrollar esta energía que podría contribuir a la descarbonización, así como generar oportunidades de inversión. En este marco, destacó la aprobación de una estrategia española de hidrógeno verde. “Estamos estudiando las oportunidades y riesgos de esta tecnología, pero tenemos claro que España no puede perder esta carrera”.
En relación a las dudas sobre el posible marco regulatorio para esta tecnología, la Ministra comentó que será necesario conocer a fondo esta energía y sus desafíos para proponer un marco regulatorio propicio.
Jochen Müller, director adjunto de la Representación de la Comisión Europea en España complementó con su intervención las palabras de la Ministra destacando que el Plan de Recuperación de España está alineado con los objetivos de transformación de la Unión Europea, pero que además, el Pacto Verde incrementa la seguridad jurídica y de inversión para que las empresas innoven. “España ofrece muchas oportunidades. Tiene un potencial superior a la media en producción de energías renovables y se encuentra entre los líderes tecnológicos mundiales de estas energías. Además, la UE ha facilitado un mecanismo para que los países que no tienen tantos recursos para la producción de energía limpia inviertan en los que sí tienen, y eso le abre a España un gran abanico de posibilidades”.
Müller destacó, además, el volumen del paquete de medidas aprobado por la UE, de las cuales muchas tendrán que destinarse a la transición ecológica. De estos fondos se beneficiarán tanto grandes empresas como pymes y startups, claves en la transformación del tejido productivo. Todos estos recursos tendrán que movilizar una cantidad similar de capital privado y se suman a los préstamos del Banco Europeo de Inversiones a la iniciativa privada verde.
Los recursos irán dirigidos a los mejores proyectos. Esto es, los proyectos que puedan absorberse de manera más rápida y eficiente y que generen el mayor impacto positivo en el entorno económico, social y medioambiental.
Fuente: Metales & Metalurgia