En despliegue de la movilidad eléctrica en España y en el País Vasco está siendo mucho más lento que en el resto de Europa, pero sin embargo la industria, especialmente la vasca, está haciendo los deberes y se está posicionando en el segmento productor, invirtiendo y desarrollando tecnología y productos propios para un mercado que está fuertemente internacionalizado.
En director gerente de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (Aedive), Arturo Pérez de Lucía, destaca que aunque el despliegue de los vehículos eléctricos se está produciendo mucho más lento de lo esperado en toda Europa, ha llegado el momento del gran cambio en el sector. “En los próximos cinco años el sector va a cambiar lo mismo que lo ha hecho en los últimos 50 años”, explicó en una jornada sobre “Eficiencia energética, coche eléctrico y energías renovables”, que organizó en la feria BEC de Bilbao el Colegio y Asociación Vasca de Periodistas.
Pérez de Lucía asegura que la movilidad eléctrica es un fenómeno imparable: la tecnología ya está preparada; los grandes fabricantes ya han empezado a destinar inversiones millonarias para posicionarse los sistemas eléctricos, a lo que se une una intensificación de la regulación en pro de los sistemas de transporte menos contaminantes.
Por ello asegura que se abre una gran ventana de oportunidad para la industria española, ya que en la actualidad España es el octavo fabricante mundial de vehículos y el segundo europeo. En este contexto, y a la vista de las iniciativas que se están desarrollando, del director de Aedive destacó el caso de la industria vasca, tanto en el desarrollo de vehículos, como de redes de carga y la creación de nuevos sistemas y servicios relacionados con la movilidad conectada.
Si se analiza el entramado industrial vasco directamente relacionado con la movilidad eléctrica nos encontramos con casos de éxito como los de Irizar, CAF, Mercedes Benz, Ibil, Orbea, Ingeteam, ZIV, Tecnalia, IK4 Ikerlan, EDS, el Cluster de la Energía y el Ente Vasco de la Energía (EVE).
Fabricantes de vehículos
Desde el punto de vista de las ‘marcas’ hay que destacar la apuesta del fabricante de autobuses Irizar que en 2014 decidió el desarrollo de un autobús integral, cien por cien eléctrico y de tecnología propia, en el que ha invertido 75 millones, incluyendo una nueva fábrica. El éxito de la iniciativa de Irizar se constata en ya hay una veintena de sus autobuses eléctricos “i2e” circulando por ciudades europeas y en el último han entrado 80 pedidos en su cartera (en que 69 corresponden a autobuses articulados).
Por su parte la fábrica de Mercedes Benz de Vitoria iniciará en 2018 la producción en serie de la versión eléctrica de la furgoneta Vito, que se hace en exclusiva allí.
En otra magnitud, pero también relevante en materia de movilidad urbana, nos encontramos las bicicletas eléctricas en destaca la apuesta de la firma Orbea.
Sistemas de recarga
La industria vasca de componentes eléctricos que también se ha volcado en la movilidad eléctrica. Tiene sede Euskadi el mayor gestor de gestor de recargas eléctricas del Estado, la compañía Ibil, promovida en 2009 por Repsol y EVE.
Además hay numerosos proyectos, como Askarga, para sistemas de recarga rápida de coches, ejecutado por Ingeteam, Ibil, ZIV, EDS, Iberdrola y Clúster de la Energía del País Vasco.
Otros proyectos sobre sistemas de recarga, incluidos inalámbricos, los están desarrollando Tecnalia y por IK4 Ikerlan y la ferroviaria CAF.