COAALI, una iniciativa impulsada por Nespresso y a la que ya se han sumado otras empresas que utilizan el aluminio en sus procesos y productos, pretende impulsar su recogida selectiva a través de los contenedores amarillos para su posterior reciclaje.
Una nueva coalición empresarial, denominada COAALI, buscará promover el reciclaje efectivo de productos de aluminio y acero ligero, materiales con un alto valor, incluso al final de su vida útil, gracias a su infinita reciclabilidad. Las tres principales líneas de trabajo serán la búsqueda de alianzas con instituciones públicas, empresas, ONG, entidades medioambientales, etc.; promover el reciclaje efectivo y fomentar la concienciación ciudadana en la gestión responsable de los residuos.
Esta iniciativa está impulsada por Nespresso, como empresa fundadora, y por el momento se han unido a la coalición las empresas Cofresco, JDE, Codorníu e Hydro Extrusion, que también valoran el potencial de sostenibilidad del aluminio y el acero ligero en sus modelos de negocio.
Según explican desde COAALI, a día de hoy, la falta de tecnología adecuada en las plantas de selección de envases impide que los productos de aluminio y acero ligero sean convenientemente reciclados y, en consecuencia, se estén desaprovechando en los vertederos. Para remediarlo, la coalición nace con la vocación de ampliar la capacidad de separación, recogida y reciclaje de estos productos en ciudades pioneras en España. Para ello, impulsará la implantación de soluciones tecnológicas innovadoras para solventar estas dificultades de separación por el pequeño tamaño de dichos residuos.
Además, COAALI trabajará para que el reciclaje sea lo más fácil y cómodo posible para el ciudadano, exponiendo a las diferentes administraciones locales y regionales la posibilidad de que estos productos se puedan depositar en el contenedor amarillo, lo que en opinión de los impulsores de la iniciativa supondría un importante avance en el cumplimiento de los objetivos europeos de reciclaje. En resumen, buscará el diálogo y la cooperación para la implantación de un sistema de recogida y reciclaje de estos materiales.
LA EXPERIENCIA DE FRANCIA
Una coalición similar ya se está desarrollando en Francia, donde, según Thomas Reuter, portavoz de COAALI y director general de Nespresso en España, «el 30% de los franceses puede depositar productos de aluminio y acero ligero en el contenedor amarillo, cifra que alcanzará el 50% en 2 años». Respecto a las cápsulas de café Nespresso, ha destacado su “inmenso valor incluso al final de su vida útil, al haber optado por el aluminio como material sostenible. Por ello, llevamos más de 10 años impulsando iniciativas de reciclaje, incluso con un sistema propio con más de 1.650 puntos de recogida en España, que será complementario a los proyectos pilotos para contenedor amarillo que desarrolle la coalición”.
Leonardo Herrán, Country Manager Cofresco Ibérica, ha afirmado que «rediseñar, reducir y reciclar es la estrategia que queremos implementar para los años venideros en el diseño y producción de todos nuestros productos. COAALI es el proyecto idóneo para llevar a cabo esta filosofía y dar una segunda vida a nuestros productos».
Ana Vázquez, Vicepresidenta de Hydro Extrusion en España y Portugal, destaca: «la sostenibilidad es uno de los grandes retos de nuestra época. La selección de materiales cobra importancia en una economía circular cada vez más necesaria y el aluminio, infinitamente reciclable, está llamado a jugar un papel fundamental en este sentido».
CICLO DE VIDA INFINITO
El aluminio es 100% reciclable y encaja perfectamente en la economía circular al caracterizarse por su ciclo de vida infinito: el 75% del aluminio producido en toda la historia sigue usándose a día de hoy, gracias a que sus propiedades no cambian durante el proceso de reciclado. Así, dada su versatilidad y resistencia, el aluminio reciclado puede convertirse en un nuevo producto sin perder calidad y formar parte, por ejemplo, de ordenadores o automóviles. También es un material que destaca por su ligereza, lo que reduce el impacto ambiental de su transporte.
Además, si el aluminio se recicla, se ahorra un 95% de energía respecto a la necesaria para su producción a partir del mineral de origen (la bauxita), obteniendo importantes beneficios medioambientales gracias al uso eficiente de los recursos. Así, con solo un 5% de la energía necesaria para producir nuevo aluminio, este puede ser reciclado y tener una segunda vida.
Fuente: RESIDUOS PROFESIONAL