El Parlamento Europeo votó el miércoles (14 de septiembre) a favor de un objetivo del 45 % de energías renovables en el mix energético de la UE para 2030, allanando el camino para las negociaciones con los 27 estados miembros para finalizar el texto antes de fin de año.
La guerra de Rusia en Ucrania es “una guerra contra nuestra energía, una guerra contra nuestra economía, una guerra contra nuestros valores y una guerra contra nuestro futuro”.
Esas palabras fueron las de Ursula von der Leyen, la presidenta de la Comisión Europea que se dirigía al Parlamento el miércoles en su discurso anual sobre el Estado de la Unión.
Y los eurodiputados aparentemente tomaron nota.
Con 418 votos a favor, 109 en contra y 111 abstenciones, el Parlamento aprobó una nueva revisión de la directiva de 2018 sobre energías renovables, parte de los planes de la UE presentados el año pasado con el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 55% antes de que finalice la década.
El objetivo del 45 % de energía renovable es superior al 40 % aprobado por los estados miembros en junio, una decisión que, sin embargo, no tuvo en cuenta las consecuencias de la guerra en Ucrania y el plan REPowerEU de la Comisión presentado en mayo, que revisó los objetivos de la UE. hacia arriba.
Si los estados miembros de la UE confirman este nuevo objetivo en las próximas conversaciones con el Parlamento a finales de este año, la UE tendrá que lograr una participación del 45 % de energías renovables en su combinación energética general para 2030, más del doble de la tasa actual del 22 %.
Para lograr el objetivo de toda la UE, cada país de la UE deberá implementar un mínimo de dos proyectos de electricidad transfronterizos, e incluso tres para aquellos con un consumo anual de electricidad de más de 100 teravatios-hora (TWh).
“Este es un buen día para la transición energética en Europa”, dijo Markus Pieper, un eurodiputado alemán del Partido Popular Europeo (PPE) de centro-derecha que es el principal negociador del texto en el Parlamento.
Objetivo insuficiente según la izquierda y los Verdes
Los Verdes y La Izquierda intentaron presionar por un objetivo renovable aún mayor del 55-56 % para 2030 con el fin de alcanzar el 100 % de energías renovables para 2040.
Pero la alianza entre el PPE, el centrista Renew Europe y el izquierdista S&D acabó imponiéndose a las reservas de los eurodiputados verdes, que no obstante votaron mayoritariamente a favor del texto, a diferencia de los miembros de La Izquierda.
Manon Aubry, una eurodiputada francesa que es copresidenta del grupo La Izquierda en el Parlamento, dijo a EURACTIV.fr que se abstuvo porque la directiva “no es lo suficientemente ambiciosa” y no propone “objetivos nacionales vinculantes de energía renovable” en los países de la UE.
La izquierda radical también se opuso al mantenimiento de la biomasa en la definición de energía renovable.
Los eurodiputados finalmente apoyaron la inclusión de la biomasa en el mix energético renovable de la UE pero a un nivel que no debería superar la media registrada en 2017-2022, teniendo en cuenta que la bioenergía representa casi el 60 % de las fuentes de energía renovable de la UE .
Y aunque el texto del Parlamento introduce una reducción progresiva de la biomasa, no indica una fecha de finalización, lo que no satisfizo a los ecologistas y a la izquierda, que pidieron una eliminación completa para 2030.
“Lo que muchos de ustedes están proponiendo es continuar quemando bosques por el bien del clima”, dijo al Parlamento Marie Toussaint, eurodiputada francesa de los Verdes/ALE.
Aún así, el texto apoya el fin de los subsidios a la biomasa utilizada en las centrales eléctricas , así como la exclusión del aceite de palma y la soja de los biocombustibles para el transporte.
Los tres grupos políticos más grandes del Parlamento Europeo han respaldado propuestas para poner fin a los subsidios a la biomasa utilizada en las centrales eléctricas y excluir la quema primaria de madera de los objetivos de energía renovable de la UE.
ROJO IV próximamente
El texto del Parlamento también define objetivos secundarios para sectores como el transporte, los edificios y la calefacción y refrigeración urbanas.
En cuanto a la definición de hidrógeno “verde” a partir de energías renovables, los eurodiputados aplazaron el asunto a otra ley de la UE que también definirá el hidrógeno “bajo en carbono” producido, por ejemplo, a partir de la energía nuclear.
El texto también incluye un aumento del 13% al 16% en el objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero para el transporte, así como una cuota del 5,7% de los combustibles renovables de origen no biológico (RFNBO) en el mercado de combustibles para 2030, tal y como establece en el programa REPowerEU de la Comisión.
Sin embargo, los objetivos de REPowerEU, como la definición de “áreas de acceso” y procedimientos de autorización más rápidos para las energías renovables, no se incluyeron en esta versión de la directiva.
El ponente, Markus Pieper, trató de fusionar estos objetivos en el texto, pero finalmente se retractó por razones legales.
Se presentará una nueva revisión de la directiva (RED IV) a fines de septiembre, dijo Pieper, con la idea de fusionar los dos procedimientos de revisión durante las conversaciones finales con los estados miembros de la UE más adelante en el año.
Fuente: Euractiv.com