La Fundación Ellen MacArthur trabaja con empresas y gobiernos de todo el mundo para acelerar la transición económica en la lucha contra el cambio climático y la contaminación
Pablo Isla, presidente de Inditex, junto a los CEO y presidentes de grupos como L’Oréal, Danone, Pepsico, Renault, Unilever, Nestlé, Stella McCartney, Amcor o Barklays Bank integran una lista de 50 dirigentes de entidades sociales (incluida la ecologista WWF) y empresariales globales en una declaración por la economía circular con el lema: Es hora de dar un paso adelante, no dar un paso atrás.
La promotora de esta iniciativa es la Fundación Ellen MacArthur y engloba diferentes sectores de acción: desde la alimentación hasta las finanzas, pasando por plásticos y ropa. “La economía lineal tiene que cambiar: debemos transformar los elementos del sistema de recogida de residuos: cómo lo gestionamos, cómo fabricamos y usamos los productos, y qué hacemos con los materiales después. Solo así podremos crear una economía próspera que pueda beneficiar a todos dentro de los límites de nuestro planeta”, aseguran desde la fundación.
Por ejemplo, en el ámbito de la alimentación el reto es eliminar el concepto de residuos y para ello hay que rediseñar los productos y la cadena de suministros, es decir, conectar la producción local con el consumo, siempre que sea posible. En el caso del mundo de las finanzas se pretende movilizar capital hacia soluciones ‘circulares’.
En el sector de la moda, uno de los puntos que se persiguen es que la ropa se use más gracias a la utilización de materiales seguros y renovables. Por último, en el caso de los plásticos, el objetivo es eliminar el uso de los que no se necesitan y para ello el reto es innovar en modelos de negocio y materiales para “hacer circular todo el plástico que se usa, mantenerlo en los procesos económicos y, así, fuera del medio ambiente”.
El impacto de la Covid-19
El temor de algunos sectores de la sociedad es que los graves efectos del impacto de la pandemia por la Covid-19 pueda llegar a desviar la atención de otros desafíos, entre ellos la lucha contra el cambio climático y la contaminación. En este sentido, según el manifiesto de esta fundación, la economía circular es una solución sobre cómo hacer frente a estos desafíos.
Así, al pensar y diseñar la eliminación de los residuos, reaprovechar materiales usados y regenerar los sistemas naturales, se están creando oportunidades no solo para el crecimiento económico, sino que también ayudan a restaurar el medio ambiente, crear puestos de trabajo y, en definitiva, benefician a la sociedad, aseguran en este comunicado.
El siguiente objetivo de esta fundación está en ampliar su ámbito de acción a sectores como los de la salud, la tecnología, la movilidad, la electrónica o los productos químicos… Para ello, realizan un llamamiento a más empresas, gobiernos e instituciones financieras de todo el mundo para que se unan en este viaje hacia una economía circular e invertir en estas soluciones.
Fuente: innovadores.larazon.es