La transición hacia una economía de bajas emisiones puede ofrecer oportunidades en un contexto de presión sobre los ingresos
Aunque el cambio climático añade riesgos que podrían materializarse más allá del horizonte temporal que los bancos habitualmente consideran en su planificación de negocio, está claro que las entidades financieras necesitan actuar ya. La toma de decisiones estratégicas requiere cierto tiempo y las consecuencias del cambio climático podrían ser más difíciles de gestionar cuanto más se espere para atajarlas. En nuestra organización consideramos que el sistema financiero deberá adaptarse al rápido incremento de las temperaturas a nivel global, a fenómenos climáticos y a sus efectos directos e indirectos sobre el negocio y sobre el ser humano, tales como la escasez de agua y las migraciones.
Diferentes estudios demuestran que el valor de los activos financieros podría reducirse y las pérdidas podrían crecer exponencialmente con el incremento medio de las temperaturas. Por ello, es importante para el sector bancario entender el efecto que el cambio climático puede tener sobre la industria para reducir costes futuros e impacto sobre el perfil de crédito…read more
Fuente: CINCO DÍAS