Este mes de agosto la Comisión Europea ha publicado las directrices para ayudar a los Estados miembros y a las partes interesadas a aplicar las normas sobre la reutilización segura de las aguas residuales urbanas tratadas para el riego agrícola. Dado que varios Estados miembros sufren cada vez más sequías, la reutilización del agua de las plantas de tratamiento de aguas residuales urbanas puede convertirse en una herramienta esencial para garantizar una fuente de agua segura y predecible, al tiempo que reduce la presión sobre las masas de agua y mejora la capacidad de la UE para adaptarse al cambio climático.
El comisario de Medio Ambiente, Pesca y Océanos, Virginijus Sinkevičius, ha explicdo que “los recursos de agua dulce son escasos y están cada vez más bajo presión. En tiempos de picos de temperatura sin precedentes, debemos dejar de desperdiciar agua y usar este recurso de manera más eficiente para adaptarnos al clima cambiante y garantizar la seguridad y sostenibilidad de nuestro suministro agrícola. Las directrices de hoy pueden ayudarnos a hacer precisamente eso y garantizar la circulación segura, en toda la UE, de productos alimenticios cultivados con agua regenerada”.
Promover una gestión más eficiente
La reutilización del agua puede limitar las extracciones de aguas superficiales y subterráneas y promover una gestión más eficiente de los recursos hídricos, a través de los múltiples usos del agua dentro del ciclo urbano del agua, en línea con los objetivos de la UE en el marco del Pacto Verde Europeo.
Este impulso hacia un uso más eficiente del agua también se refleja en la reciente propuesta de la Comisión para revisar la Directiva sobre emisiones industriales , que exige también un uso más eficiente del agua en todos los procesos industriales, incluida la reutilización del agua. La próxima propuesta de la Comisión para revisar la Directiva de tratamiento de aguas residuales urbanas también tendrá como objetivo facilitar aún más la reutilización del agua.
Requisitos mínimos para la reutilización del agua
Para garantizar la coordinación entre los Estados miembros, cuando la reutilización del agua sea de importancia transfronteriza, los Estados miembros deberán designar un punto de contacto para garantizar los intercambios oportunos con los puntos de contacto y las autoridades competentes de otros Estados miembros.
El Reglamento también establece requisitos mínimos de seguimiento armonizados, disposiciones de gestión de riesgos para evaluar y abordar posibles riesgos adicionales para la salud y posibles riesgos ambientales, obligaciones de permisos y disposiciones sobre transparencia, mediante las cuales la información clave sobre cualquier proyecto de reutilización de agua debe ponerse a disposición del público.
Fuente: Retema