La Comisión acoge con satisfacción el acuerdo alcanzado hoy (7 de julio de 2023) en la Organización Marítima Internacional (OMI) de revisar su estrategia de 2018 sobre la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de los buques. El acuerdo es un hito para reducir la huella de carbono del transporte marítimo internacional y garantizar una contribución justa del sector del transporte marítimo a la consecución de los objetivos del Acuerdo de París, proporcional al 3 % de las emisiones mundiales que provoca. Ahora que se ha alcanzado el acuerdo, es importante empezar a aplicarlo lo antes posible.
La estrategia revisada de 2023 establece un objetivo de
La estrategia también define la meta importante de que, para 2030, se haya adoptado al menos un 5 % (con las miras puestas en alcanzar el 10 %) de tecnologías, combustibles o fuentes de energía con emisiones de gases de efecto invernadero nulas o casi nulas. Esta meta pondrá en marcha la transición enviando una señal clara a las industrias marítima y de los combustibles, e incentivando las decisiones de inversión necesarias y las opciones relativas a los combustibles.
Por último, se lograron avances satisfactorios en las medidas para alcanzar las metas. La OMI llegó a un consenso sobre la necesidad de adoptar tales medidas para 2025 y sobre la pertinencia de que incluyan una norma que regule la reducción gradual de la intensidad de GEI de los combustibles para uso marítimo y un mecanismo de fijación de precios de las emisiones de GEI en el sector marítimo. Las medidas se elaborarán sobre la base de una evaluación de impacto exhaustiva mediante la cual se garantice que reducen efectivamente las emisiones del sector y que, al mismo tiempo, contribuya a unas condiciones de competencia adecuadas y a una transición justa y equitativa que no deje a nadie atrás.
Los niveles de ambición y los puntos de control indicativos tienen en cuenta las emisiones de GEI durante el ciclo de vida de los combustibles para uso marítimo con el objetivo de reducirlas dentro de los límites del sistema energético del transporte marítimo internacional, evitando así un desplazamiento de las emisiones a otros sectores. A este respecto, la Comisión acoge con satisfacción la aprobación de las directrices sobre la intensidad de GEI
Los Estados miembros de la UE y la Comisión colaboraron estrechamente y demostraron su liderazgo al facilitar el acuerdo de hoy. La UE seguirá colaborando con las partes de la OMI para decidir medidas claras y ambiciosas de aquí a 2025, así como para seguir prestando asistencia a los países en desarrollo y a los países menos adelantados.
Fuente: Comisión Europea