Las infraestructuras de gestión y valorización de residuos son imprescindibles para garantizar la transición circular en Euskadi

Posted by aclimaadmin | 11/01/2024 | Aclima bloga

El Pacto Verde compromete a la UE con la descarbonización, la neutralidad climática y el desarrollo sostenible. Para ello, es indispensable que la economía experimente una transición ecológica apostando por un modelo circular de aprovechamiento y valorización de residuos. Pero la realidad es que en la actualidad tan solo el 12% de los materiales que emplea la industria europea proviene del reciclado. En Euskadi, el sector industrial supone el 23,4% del PIB, por lo que construir nuevas infraestructuras de gestión y valorización de residuos significa una oportunidad para apoyar a la industria vasca en su transición, garantizando su acceso a materiales procedentes del reciclado que la hagan más resiliente y sostenible. Así mismo, el sector de los residuos tiene un papel clave en la transición energética para asegurar la gestión y valorización de los residuos generados por las plantas de energía renovable, especialmente, en su desmantelamiento.

La industria es uno de los ejes de las iniciativas relacionadas con el Pacto Verde Europeo, puesto que es indispensable como factor dinamizador y de competencia para garantizar una economía desarrollada que apueste por la innovación y la sostenibilidad. En la Estrategia Industrial Europea se definen los principios de la evolución del tejido industrial del continente en su adaptación a la doble transición, verde y digital, en la que estamos inmersos.

En Euskadi el sector industrial tiene una gran importancia, siendo una de las claves del desarrollo económico. A su vez, somos una de las regiones de Europa que más ha apostado por la Economía Circular, y el Plan de Desarrollo Industrial e Internacionalización 2021-2024 aprobado por el Gobierno Vasco conjuga estas dos realidades para asegurar la competitividad de la industria vasca facilitando su adaptación a la transición energética y climática. Entre sus objetivos, que el 40% del PIB provenga de la industria manufacturera y los servicios avanzados como actividad conexa a la industria, que las exportaciones sean un tercio del PIB, que Euskadi se convierta en un polo de innovación europeo y generar nueva actividad relacionada con las transiciones energético-climática y tecnológico-digital. En esta misma línea, el Plan Estratégico de Transición Energética y Cambio Climático 2021- 2024, el Plan de Ciencia, Tecnología e Innovación Euskadi 2030,la Estrategia Energética de Euskadi 2030 (3E2030), la Estrategia de Economía Circular 2030, y la Estrategia de Cambio Climático 2050 (Klima 2050) también se enfocan en las oportunidades de la doble transición para Euskadi.

Pero para ello es imprescindible robustecer el sector de la gestión y valorización de residuos, apoyando la creación de nuevas infraestructuras. Por eso, el Plan de Prevención y Gestión de Residuos del País Vasco 2030 (PPGR2030) establece que para 2030 Euskadi valorice el 85% de los residuos no peligrosos, reduciendo hasta el 15% los que acaban en vertedero. Pero alcanzar estas metas implica la construcción de nuevas infraestructuras de gestión y valorización de residuos, que sirvan de apoyo a la industria, minimicen los impactos ambientales de los residuos gestionándolo en proximidad y seguridad y, en definitiva, contribuyan de manera importante al crecimiento de la economía, generando nuevas oportunidades para las empresas y colaborando en la creación de empleo.

Materias primas críticas

Se necesita implicación del sector industrial para conseguir la descarbonización y neutralidad climática de Europa, la gestión y valorización de residuos supone un factor clave de la economía circular debido a que facilita que la industria acceda a materiales obtenidos de equipos o productos cuando se convierten en residuos al final de su vida útil. Algunos de estos materiales son materias primas estratégicas que Europa importa y que son escasas en el entorno natural.

Esta es una de las razones por la que la UE es cada vez más restrictiva con el traslado transfronterizo de residuos. Se trata de una oportunidad, si tenemos en cuenta que Europa necesita importar de otras regiones entre el 75% y casi el 100% de muchas sustancias, en especial los minerales empleados en los sectores de las nuevas tecnologías y de las energías renovables. Pero la realidad es que a día de hoy solo el 12 % de los materiales utilizados por la industria de la UE procede del reciclado, y, como ejemplo, en Europa se reciclan menos del 40% de los 9 millones de toneladas de desechos electrónicos generados cada año.

Para subsanar esta pérdida de oportunidades económicas se han impulsado la Directiva sobre residuos de aparatos eléctricos y electrónicos y la Ley de Materias Primas Críticas, que aboga por garantizar la soberanía de recursos, la resiliencia y la competitividad de la industria europea. La ley Establece objetivos de circularidad para fomentar la extracción de más materias primas estratégicas a partir de residuos, pero para lograrlo es necesario que surjan nuevas instalaciones de gestión y valorización de residuos. Recordemos que las materias primas críticas son fundamentales para las transiciones ecológica y digital y que es imprescindible garantizar un suministro seguro y sostenible de estos materiales.

Gestionar los residuos de la transición energética

La Economía Circular va a tener un papel relevante en la transición energética europea, ya que, según estima la Agencia Europea del Medioambiente (AEMA), en los próximos 10 años pueden multiplicarse por 30 los residuos procedentes de las infraestructuras de energía sostenible al final de su vida útil. Además, entre este tipo de materiales hay muchas sustancias incluidas en la lista de materias primas críticas de la UE. Por lo tanto, se trata de una oportunidad única para impulsar el sector de la gestión y valorización de residuos en Euskadi, ya que el correcto tratamiento de este tipo de desechos puede suponer un ahorro económico y ambiental, reduciendo el consumo de materias primas escasas. A nivel europeo, la Ley sobre la industria de cero emisiones netas regula la fabricación de tecnologías limpias en la UE, considerando también la necesidad de la gestión y valorización de sus residuos.

Según los datos de 2022, España es el primer país de Europa y quinto país del mundo por potencia fotovoltaica instalada, lo que le sitúa en el primer puesto global por mayor penetración fotovoltaica, con una tasa del 19,1%. Además, las estimaciones de la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA) adelantan que para 2030 puede haber hasta tres millones de toneladas de módulos fotovoltaicos obsoletos en la UE, lo que la colocaría como segundo mercado de residuos fotovoltaicos del mundo después de Asia.

Los expertos prevén que para aproximadamente 2030 casi el 90% de los aerogeneradores instalados en España tendrán más de 20 años de vida y el 50% se aproximará a los 25 años, por lo que se deberá acometer la gestión y valorización de los materiales retirados en su necesaria renovación.

En definitiva, la transición circular y energética supone una oportunidad para la industria vasca, ya que es un sector con mucho peso en la economía de Euskadi, posicionado de manera importante en el área de la energía y con iniciativas dentro de la movilidad sostenible y las renovables. Pero para poder aprovechar esta coyuntura el sector de la gestión y valorización de residuos debe apoyar al tejido industrial con nuevas instalaciones que permitan valorizar sus residuos de manera eficiente, facilitándole materiales que puedan aprovecharse en su cadena de valor.

Posts Relaccionados

Posted by aclimaadmin | 26 apirila 2024
Paradójicamente tendemos a hacer oídos sordos a la contaminación acústica, minusvalorando sus efectos y gravedad. Pero lo cierto es que la OMS la considera uno de los factores ambientales que...
Posted by aclimaadmin | 19 apirila 2024
Las emisiones europeas de CO2 procedentes de combustibles fósiles han caído un 8% en 2023 respecto al año anterior, lo que supone que se sitúen en su nivel más bajo...
Posted by aclimaadmin | 12 apirila 2024
La UE debería incrementar en 406.000 millones de euros adicionales al año sus inversiones para estar en posición de lograr las metas fijadas en el Pacto Verde. Esta es la...